29 de marzo de 2014

4.4.1 Partículas Subatómicas

4.4.1 Partículas Subatómicas


La acumulación cuantitativa generada por la contradicción entre la materia en reposo relativo, donde predomina la fuerza gravitatoria, y la fuerza en movimiento relativo, donde predomina la fuerza electronuclear, produce la transformación que deviene en el Big Bang cíclico, es decir; el fin de un cosmos y el inicio de otro. La contradicción continúa y la acumulación cuantitativa generada por la contradicción entre la materia en reposo relativo (Gravedad) y la materia en movimiento relativo (Fuerza Electronuclear), produce la transformación que deviene en partículas subatómicas. 
En el lenguaje común de la física cuántica una partícula subatómica es una partícula más pequeña que el átomo. Puede ser una partícula unitaria o una compuesta, a su vez, por otras partículas subatómicas, como son los quarks, que componen los protones y neutrones. No obstante, existen otras partículas subatómicas, tanto compuestas como elementales, que no son parte del átomo, como es el caso de los teóricos; neutrinos y bossones.

La mayoría de las partículas elementales que se han descubierto y estudiado no pueden encontrarse en condiciones normales en la Tierra, generalmente porque son inestables (se descomponen en partículas ya conocidas), o bien, son difíciles de producir de todas maneras. Estas partículas, tanto estables como inestables, se producen al azar por la acción de los rayos cósmicos al chocar con átomos de la atmósfera, y en los procesos que se dan en los aceleradores de partículas, los cuales imitan un proceso similar al primero, pero en condiciones controladas. De esta manera, se han descubierto docenas de partículas subatómicas, y se teorizan cientos de otras más.
Como partículas subatómicas, se clasifican también las partículas virtuales, que son partículas que representan un paso intermedio en la desintegración de una partícula inestable, y por tanto, duran muy poco tiempo.

Sin embargo hay que aclarar, que las partículas subatómicas, en realidad son únicamente entidades metodológicas del modelo atómico de la física cuántica.

Gustavo Bueno: las «gluinas», supe simétricas de los gluones, como las «gravitinas», de los gravitones, son obviamente, hoy por hoy, «tejido conjuntivo hipotético» de la mecánica cuántica; los mismos «gravitones», como cuantos del campo gravitatorio, y, en general, las llamadas «partículas mensajeras» de interacción –fotones, gluones, bossones W+, W-, Z, de la fuerza débil– son, hoy por hoy, hilos del tejido conjuntivo de una construcción física que se orienta por esquemas corpusculares, como hipótesis de trabajo, antes que por esquemas de trabajo ondulatorios. (TCC, pág. 897)”

En este sentido, hay que dejar claro entonces, que las partículas subatómicas, no son entidades objetivas reales, sino entidades subjetivas imaginarias, de los sujetos gnoseológicos, influenciados por la idea de “puntos”, es decir, por entidades “corpusculares”. Pero como ya he explicado anteriormente, éste esquema de trabajo no puede ser completamente correcto, pues la materia es una unidad dialéctica entre partículas y ondas. Es decir; son y no son simultáneamente.
Lamentablemente la física cuántica, no ha profundizado en desarrollar entidades hipotéticas orientadas, a la unión dialéctica entre onda y partícula. Se han limitado únicamente a la forma corpuscular de: “partícula”.

Sin embargo, hay que resaltar que la interacción dinámica entre las partículas subatómicas, deben necesariamente seguir el modelo:


Transformación – Materia – a)Materia en movimiento y b)Materia en reposo. Es decir, que existen entidades subatómicas en movimiento, y entidades subatómicas en reposo. La lucha de estos dos tipos de partículas, forman un esquema toroidal llamado “Átomo”. 

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